Por alguna razón, esperamos como agua de mayo que alguna consultora o empresa de marketing elabore el ranking de empresas más valiosas, como si eso tuviera un poder hegemónico. Tenemos la lista de Kantar Millward Brown y WPP, autores de una famosa clasificación, la BrandZ Top 100 Most Valuable Global Brands; la de Forbes, que encumbró a BMW este año, o la de la consultora Interbrand, que ya ha publicado su lista de las 100 empresas más valiosas del mundo por valor de marca y su desempeño en el mercado.
Encontramos representadas en el ranking a 16 marcas automotrices: Toyota en el número 7 y Mercedes-Benz en el número 10 del top 10; fuera se quedan BMW, Honda o Ford, y un considerable batacazo de Tesla, cuyo valor ha descendido hasta el puesto 98. Y una sopresa: MINI se posiciona por encima de Ferrari.
Valor de marketing, no de mercado
Estas clasificaciones se basan en el éxito financiero de los productos y servicios de una marca, pero también en el papel de la marca en la toma de decisiones de los clientes y su impacto en los precios de las empresas. Realmente, el valor de la marca no nos dice nada respecto a cómo está en el mercado, más bien, es como una guía de los gurús del marketing.
Aunque las marcas de alto valor responden mejor a los ataques y se pueden recuperar más rápido de las situaciones adversas, no implica que pueda estar en problemas futuros o en un proceso de desinversión. Aún así, la lista que publica anualmente Interbrand nos ofrece un mapa de cómo evoluciona el sector de la automoción, que precisamente es el segundo sector más valioso con un valor de 266.827 millones de dólares, por detrás del sector tecnológico.
Toyota lidera el primer puesto con un valor que supera