Hyundai ha perfilado su estrategia de desarrollo de motores de los próximos años en Corea. Estos nuevos propulsores diésel y gasolina de 1.6 litros estarán disponibles para todos los vehículos de la firma asiática. Estas motorizaciónes serán muy eficientes, y compartiran desarrolo indrustrial con otros sistemas de propulsión híbridos y eléctricos que adoptarán una nueva generación de pila de combustible.
Esta nueva generación de motores ofrecerá componentes reducidos en tamaño y peso para mejorar la eficiencia del combustible. Gracias a estos avances tecnológicos, Hyundai tiene como objetivo maximizar la eficiencia térmica hasta en un 50%.
Estas motorizaciones también adpotarán el primer uso comercial del aparato de duración de válvula variable (CVVD). En el propulsor la apertura y el cierre de la válvula del cilindro están programado para responder mejor a los distintos modos de conducción, como la conducción ecológica o la conducción dinámica. Otras nuevas tecnologías incluyen la transmisión inteligente de ocho velocidades de doble embrague (SES).
Para 2022, Hyundai tiene como objetivo desarrollar una nueva línea de producción para fabricar las diez unidades de gasolina y seis de diésel que tiene previsto lanzar la marca.
Según Hyundai, el motor de combustión interna mantendrá una fuerte presencia en el mercado hasta el año 2025, a medida que las transmisiones híbridas y eléctricas enchufables comiencen a recibir una mayor aceptación. Para responder a la diversificación de las necesidades del mercado, la marca coreana producirá una mayor proporción de sistemas de propulsión híbridos eléctricos, de pila de combustible y eléctricos, junto con sus nuevos y altamente eficientes motores de combustión interna Smart Stream.
Este cambio para producir la nueva generación de motores se combina con planes para mejorar la capacidad de la batería y aumentar las capacidades del rango eléctrico sólo de sus modelos eléctricos, proporcionando un mayor valor a los clientes.
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