El Volvo XC40 es el lanzamiento más importante de este curso 2017/18 para Volvo. Es un crossover compacto premium, militante de pro en uno de los segmentos de moda, y uno de los segmentos que más sigue creciendo. A todos los efectos, será el reemplazo del veterano Volvo V40, al que reemplaza con una carrocería más aguerrida, una posición de conducción más elevada y grandes posibilidades de personalización. Si estás ansioso por la llegada del Volvo XC40, te alegrará saber que su producción ya ha empezado a pleno pulmón en la fábrica de Volvo en Gante (Bélgica).
De hecho, Volvo tiene ya 13.000 pedidos en firme para su nuevo crossover compacto. Una cifra más que interesante para un coche cuyos precios arrancan en la friolera de 42.220 euros – para un D4 Momentum, a la espera del lanzamiento progresivo de motorizaciones menos potentes – o 699 euros mensuales, si optamos por el innovador modelo de suscripción Care by Volvo estrenado por el XC40 (ver artículo sobre Care by Volvo en este enlace). Según comunica la marca sueca, los primeros en reservar su unidad la recibirán a principios del próximo año, posiblemente a finales del mes de enero.
Unos meses después de su lanzamiento llegarán los motores T3 y D3, diésel y gasolina con 150 CV de potencia, acompañados de precios más bajos.
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Para el mercado europeo, Gante será la fábrica exclusiva del Volvo XC40. En ella se han hecho fuertes inversiones para su producción, en la que participan actualmente 363 robots, uno de ellos apodado “la bestia”, ya que se encarga de mover carrocerías completas entre diferentes secciones de la línea productiva. Los Volvo XC40 usan la plataforma CMA de Volvo, una plataforma modular para vehículos compactos que ha sido codesarrollada junto a Geely. Gracias