Hace unos días comenzó a circular información acerca de que Porsche había decidido finalizar la producción de todos los vehículos diésel actuales ante una caída de la demanda, específicamente las versiones diésel de los Porsche Macan y Panamera.
Sin embargo, según informa Automotive News Europe, el jefe de ventas de Porsche, Detlev von Platen, ha confirmado que el fabricante espera lanzar una versión diésel del SUV Cayenne este año así como del Macan, que se someterá a un lavado de cara este año. «No hemos dando a entender que estamos saliendo [del diésel]», ha dicho. Solo han adaptado sus planes de producción a una revolución eléctrica que enterrará los motores diésel.
Un cambio cultural
En medio de informaciones acerca de que Porsche había decidido detener la producción de sus motores diésel, Von Platen restó importancia a este tren motriz para la marca, que ni fabrica ni desarrolla diésel. Obtiene los que usa de la marca hermana del Grupo Volkswagen, Audi.
Según desvela este alto cargo, la motorización diésel nunca fue extremadamente relevante para la firma, que apuesta por la electrificación y la hibridación. «Solo alrededor del 14 % de los 246.000 vehículos que vendemos en todo el mundo son diésel», ha añadido el jefe de ventas.
Desde 2016 se han llamado a revisión en Alemania alrededor de 8.600 Macan 3.0 V6 diésel y se espera que comience otra llamada a revisión de 52.500 de estos modelos en Europa.
«Vemos una gran demanda de nuestros híbridos enchufables, especialmente con la última generación», ha añadido. Y es que Porsche ha duplicado su inversión en electromovilidad con 6.000 millones de euros, con el foco puesto tanto en modelos híbridos enchufables como en eléctricos puros de aquí a 2022.
Hace tan solo un día, Porsche resumió en un comunicado que se están llevando a cabo «optimizaciones de sus motores