Esta semana ha sido muy importante para Ford Motor Company pues además de presentar al mundo entero la cuarta generación del Focus, a puesto al día uno de los modelos que mayor ventas logra en China, el Escort. Para ello, ha realizado un evento en la ciudad de Chongquing en el que han mostrado los cambios que han introducido al icónico modelo, que casualmente fue al que sustituyó el Focus hace ahora veinte años.
De entrada los cambios estéticos que sufre el renovado Escort son limitados, aunque los suficientes como para que parezca varios años más joven. Lo primero que han cambiado es la parrilla frontal en la que sus lamas horizontales pasan a estar cubiertas de cromo. Los grupos ópticos también han sido objeto de cambio, pues han pasado a incluir tecnología LED para la iluminación diurna. Por último, el paragolpes suaviza sus formas e integra en sus esquinas los faros anti nieblas.
En la parte trasera también hay cambios y de igual importancia. Los grupos ópticos también incluyen tecnología LED y reorganizan sus posiciones para actualizarse. El paragolpes también suaviza sus ángulos con unas líneas más redondas. Por último, llama la atención la antena de tipo “aleta de tiburón” que han incluido. El resto de cambios que definen la personalidad del Ford Escort se han limitado a nuevas llantas de aleación, diferentes tonalidades para vestir su carrocería y aplique terminados en cromo.
Ya en el interior, sorprende el nuevo cuadro de instrumentos, pues por diseño y formato de las grafías parece de un vehículo de mayor categoría. Completan los cambios recibidos en el habitáculo las inserciones acabadas en aluminio pulido y en plásticos lacados “efecto piano” que incrementan la sensación de calidad. Además, la firma americana ha confirmado que las posibilidades de personalización del Escort se han incrementado.
El nivel tecnológico del nuevo