Un informe reciente de Consumer Reports aseguró que los frenos del Tesla Model 3 no eran tan potentes como deberían ser. La información vertida repercutió en las acciones de la compañía según informa Reuters y las dudas sobre la seguridad del Model 3 provocaron que Elon Musk saliera al paso prometiendo una actualización de software del modelo para solucionarlo.
A los problemas financieros y de producción que está sufriendo Tesla durante los últimos meses se añade ahora el informe desfavorable de Consumer Reports en el que la revista ha concluido después de realizar varias pruebas que el Tesla Model 3 «frena peor que cualquier automóvil contemporáneo que hayamos probado».
«Posiblemente sea una cuestión del firmware que podamos solucionar con una actualización OTA»
Las duras críticas del medio se fundamentaron en que las pruebas de frenado a 96 kilómetros por hora arrojaron un resultado de 46,32 metros, 2,13 metros más que una Ford F-150. Otros puntos negativos que destacaron en el análisis de Consumer Reports fue un comportamiento demasiado seco, el asiento trasero sin sujección lateral, un cuadro de mandos difícil de usar y un aislamiento acústico pobre.
Después de las declaraciones de Musk asegurando que el problema con los frenos es cierto, reconociendo que las distancias de frenado podrían mejorarse y apuntando a una actualización urgente como medida para solucionar el problema. «Tesla no parará hasta conseguir que el Model 3 frene mejor que cualquier otro coche comparable», aseguró el magnate.
La defensa de Musk se ha centrado en apuntar a dos de las primeras unidades producidas del Model 3 como culpables de los resultados deficientes, señalando que «ahora su eléctrico es más confortable y está mejor aislado además de otras pequeñas mejoras». Mientras tanto Consumer Reports apuntó en su informe que no recomendaría la compra del Model 3, pero que probarán una segunda versión