MEB es como se llama la apuesta más importante del Grupo Volkswagen en muchos años. Es como se llama una inversión de 6.000 millones de euros y es la base sobre la que construirán su mañana como grupo empresarial. Se trata de la plataforma modular que será la base de sus futuros vehículos eléctricos. En apenas siete años, en 2025, el Grupo Volkswagen quiere estar vendiendo tres millones de coches eléctricos por año. Una declaración de intenciones articulada en tres siglas, de las que vamos a contaros todos los entresijos en este artículo, organizados en cinco claves.
1) Un desarrollo completamente nuevo, 100% enfocado a eléctricos
La plataforma MEB (la traducción vendría a ser algo parecido a “matriz eléctrica modular”) es un desarrollo completamente nuevo. No se trata de una conversión a propulsión eléctrica de la plataforma MQB u otra adaptación. Se ha diseñado con el único propósito de ser la espina dorsal de una enorme familia de coches eléctricos. Al igual que otras plataformas modulares del Grupo Volkswagen, medidas como la batalla son hasta cierto punto flexibles, sirviendo para coches tan dispares como un compacto o una furgoneta de carga. La plataforma MEB tendrá un coste contenido, una vez se alcancen economías de escala productivas.
Según directivos de la marca, esta plataforma supone una transición tan importante como la producida al pasar del Escarabajo al Golf. Van en serio.
2) 27 modelos con plataforma MEB, a la venta en 2022
El primer coche construido sobre la plataforma MEB llegará al mercado a principios de 2020, y será un compacto 100% eléctrico lanzado bajo Volkswagen. Ese mismo año, sólo en Alemania, Volkswagen espera vender 100.000 eléctricos de la familia I.D. El objetivo de ventas para la primera generación de la plataforma MEB es de 10 millones de coches. Sólo hablando de Volkswagen, esperan