Europa ya se está poniendo las pilas en materia de fabricación de baterías para coches eléctricos. Alemania y Francia se han aliado para darle un empujón a esta esfera de la electromovilidad mientras que la nueva apuesta del viejo continente son las baterías de litio-azufre en estado sólido.
Bajo este mismo programa ha nacido el proyecto de investigación ‘E-Magic’, que recibirá más de 6,7 millones de euros para desarrollar baterías de magnesio y adentrarnos en la era post-litio. Además, está coordinado por una compañía española.
Explotar la alta capacidad de almacenamiento del magnesio y desbancar al litio
‘E-Magic’ es la abreviatura de Comunidad Europea de Baterías Interactivas de Magnesio. Los institutos participantes aseguran que han combinado todos los pasos necesarios para el desarrollo de baterías de magnesio, desde la investigación básica hasta los procesos para la producción de celdas de batería.
Y es que actualmente las baterías de iones de litio se enfrentan a graves desafíos en materia de seguridad, densidad energética y precio, a pesar de que la mayor parte del I +D actual se concentra en esta tecnología. La batería recargable de magnesio constituye, según fuentes europeas, un ejemplo «paradigmático» de tales sistemas de almacenamiento de energía alternativos sin litio, tan prometedores, que siguen los esfuerzos y los avances de los investigadores de todo el mundo.
En Motorpasión
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El potencial para usar ánodos metálicos de magnesio en baterías recargables trae importantes ventajas en términos de densidad de energía,