La concepción de un SUV deportivo ya no debería de extrañarnos ni de hacernos poner el grito en el cielo por muy petrolhead que seamos. Vehículos como el Lamborghini Urus o el Porsche Cayenne se encargan de dar fe de que este maridaje no es descabellado, pero ¿que pasaría si intentan demostrarlo vehículos del talante del nuevo Ford Puma? La firma del óvalo quiso revivir un apellido mítico junto a un concepto innovador, y unos rasgos que anticipan una dinámica más bien deportiva han alentado la imaginación del diseñador X-Tomi Design, quien ya ha dado forma bajo su criterio a los hipotéticos Puma ST y Puma RS. Apetecibles, ¿verdad?
La deportividad es un rasgo que siempre ha estado presente dentro de la casa americana, algo que abalan vehículos como el Mustang o el Fiesta ST. Con este contexto e historia, no sería de extrañar que Ford se aventurase a dar vida a un Puma con ciertos ademanes radicales, o sin ciertos, simplemente dotar a su nuevo SUV con la capacidad de doblegar a sus principales rivales e incluso algún que otro hot hatchback.
Para llevar a cabo la estética de estas dos supuestas variantes del recién llegado SUV, X-Tomi ha recurrido a los rasgos del Focus RS anterior y del actual ST. De esta forma, el ADN Ford se mantiene intacto pese a estar ante dos renders, provocando que la interpretación por parte del diseñador sea aún más realista.
En el caso del Puma RS, nos encontramos con unas líneas muy marcadas, mucho más agresivas y rompedoras. Esto es posible gracias a una calandra tipo panel de abeja rematada en negro y una defensa en la que dos prominentes tomas de aire anticipan el nivel de prestaciones que podría ofrecer. Mismo efecto generan las llantas, cuyo diseño heredado del Focus también provocan ese aire de chico malo.
El efecto en la variante ST es muy similar, solo que podemos apreciar como el conjunto es más suave y limpio. En esta ocasión se han tomado rasgos del Focus ST actual, que consigue adelantar parte de la deportividad y picante que ofrecerá el próximo RS. El apartado mecánico nos obliga a llevar a cabo ciertas suposiciones, pero no sería absurdo considerar que un propulsor de cuatro cilindros turboalimentado podría ser el encargado de erogar 280 CV para el más «modesto» ST y una cifra cercana a los 400 CV para el RS.
El nuevo Puma ha llegado con mucha fuerza al hacer uso de un apellido que, en su día, dio vida a un pequeño coupé, un tipo de segmento más cercano a la deportividad. Sin embargo, la idea de este SUV con ciertas prestaciones no resulta despreciable. ¿Lo qué nos separa de ambas variantes? Que de momento tan solo son fruto de la imaginación.