El Nissan Qashqai es un coche que se encuentra al final de su vida comercial pero también sigue siendo uno de los primeros coches en los que piensa la gente cuando se les pregunta por un SUV compacto. No ofrece, ni mucho menos, una tecnología semejante a la del Peugeot 3008, tampoco se comporta dinámicamente como el SEAT Ateca, ambos referencia clara en la categoría, pero con el Nisan Qashqai Q-Line la marca japonesa está dispuesta a convencerte de que u SUV sigue siendo una alternativa a tener muy en cuenta.
Así es el Nisan Qashqai Q-Line
El Nissan Qashqai Q-Line se posiciona en la parte media de la gama para ofrecernos una buena relación precio / producto y una imagen más distinguida, luciendo una curiosa configuración en la que las clásicas molduras sin pintar se terminan en el color de la carrocería, dándole así una nueva imagen al Qashqai.
Este Nissan Qashqai Q-Line está disponible con los motores gasolina de 140 y 160 CV y con el motor diésel de 115 CV. Tanto el 115 CV como el 160 CV pueden estar disponibles con cambio automático además de con el cambio manual y en ningún caso se puede asociar a un sistema de tracción total.
Equipamiento del Nissan Qashqai Q-Line
Pero, ¿qué ocurre con su equipamiento? ¿Qué nos ofrece esta versión?
El equipamiento de este Nissan Qashqai pasa por una dotación en la que destacan elementos como el control de crucero, los sensores de luz y lluvia, el sistema de reconocimiento de señales, el climatizador bizona, las llantas de aleación de 19 pulgadas, los faros Full LED, el sistema multimedia con pantalla táctil de 7 pulgadas con Android Auto y Apple CarPlay, el sistema de navegación, cámara de 360º, sensores de aparcamiento delanteros y traseros y la apertura y arranque con