La dirección de Nissan Motor Ibérica ha decidido parar temporalmente la actividad industrial por lo que ha presentado un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para garantizar la salud de sus empleados y ante las restricciones de movilidad y la falta de suministros provocadas por el COVID-19, que impiden el desarrollo ordinario de la actividad.
Esta medida excepcional se ha comunicado a la Representación de los Trabajadores de los centros de Zona Franca, Moncada y Reixach y San Andrés de la Barca (Barcelona) e incluye al conjunto de sus plantillas (aproximadamente 3.000 empleados), pero se aplicará únicamente a aquellas personas que deban interrumpir su actividad laboral por los efectos del COVID-19.
Seguirán trabajando aquellas personas cuyos puestos de trabajo les permita hacer teletrabajo y desarrollar su actividad a distancia desde casa.
El período de vigencia del ERTE por fuerza mayor presentado hoy es desde el 16 de marzo y mientras permanezcan las causas de fuerza mayor motivadas por el actual estado de alarma.
Medidas excepcionales
En los últimos días, antes del establecimiento de esta medida excepcional de flexibilidad temporal, Nissan Motor Ibérica ha tomado las medidas de prevención dispuestas por las autoridades sanitarias tales como la aplicación del teletrabajo en todos los puestos donde sea posible (esta opción está disponible desde el pasado viernes), la limitación de capacidad en las salas de reuniones o restricciones en los viajes, entre otras.
La reanudación de la actividad se comunicará a los trabajadores de la compañía a su debido momento con la suficiente antelación. La dirección de NMISA realizará un seguimiento constante de la situación y continuará en contacto en todo momento con los distintos Comités de Empresa. Noticias anteriores Marca: NissanNissan presenta el renovado Navara N-GuardUn Nissan Leaf autónomo completa 370 kilómetros en el Reino UnidoEl Nissan Qashqai lidera el segmento de los crossover en el mes